
El Shabat nos preservó
Resumen
El Shabat fue una bendición instituida en la Creación, y tiene una aplicación mucho más amplia de lo que la mayoría de la gente se imagina. Este folleto describe la sorprendente universalidad del Shabat tal y como lo describe la Biblia. Además, nos advierte de un poder que, según el profeta Daniel, intentará cambiar las leyes provisionales que Dios ha establecido.
Tipo
Folleto
Editorial
Sharing Hope Publications
Disponible en
5 Idiomas
Páginas
6
¿Te sientes estresado? Si es así, no eres el único. Vivimos en un mundo donde estar ocupado se ha convertido en un símbolo de estatus, en la medida en que vivimos ajetreados por el trabajo, las entrevistas y las actividades. Pero ¿qué queremos lograr? A fin de cuentas, la vida acelerada nos deja exhaustos y con muy poca disponibilidad para lo más importante: Dios, la familia y los amigos. Como un auto viejo con un problema tras otro, comenzamos a descomponernos en cada aspecto de la vida. ¿Es así como deberíamos vivir?
Dios nunca tuvo la intención de que viviésemos corriendo sin parar. De hecho, el descanso es tan importante que lo instituyó en el ciclo semanal.
Considera el calendario: el trayecto de la Tierra alrededor del Sol define un año; el ciclo de la Luna determina un mes; y un giro de la Tierra sobre su propio eje marca un día. Pero ¿de dónde viene la semana de siete días?
Viene de la creación de nuestro mundo. En seis días, el Creador trajo al mundo a la existencia, y descansó en el séptimo día. Durante miles de años, hemos conservado la misma estructura de tiempo que el Creador estableció originalmente para nosotros. “Dios bendijo el séptimo día, y lo santificó, porque en ese día descansó de toda su obra creadora” (Génesis/Bereshit 2:3).
Durante milenios, el pueblo judío ha honrado el Shabat en santa conmemoración del descanso del Creador durante esa semana de la Creación.
¿Quién debe guardar Shabat?
El Shabat ¿es solo para los judíos? La mayoría cree que sí. Pero ten en cuenta que Dios instituyó el Shabat antes de que se establecieran las tribus de la humanidad, mucho antes de la época de Abraham, en el mismo jardín del Edén.
Algunos sostienen que Noé, que no era judío, no guardaba el Shabat y, por lo tanto, los que no son judíos tampoco necesitan guardarlo. Esta es una especulación poco afortunada, porque Noé tenía una muy buena precepción de las leyes de Dios, incluyendo la kashrut: la separación entre lo limpio y lo inmundo (Génesis 7:2). No tenemos motivos para dudar de que Noé conocía las otras leyes de Dios, incluyendo el Shabat.
Los rabinos enseñan, por medio del midrash que, cuando Dios habló en el Sinaí (Éxodo/Shemot 20:1), sus palabras se escucharon en los setenta idiomas conocidos en ese momento, que simbolizaban el mundo entero.1 Si la Torá era solo para Israel, ¿por qué debería escucharse en todos esos idiomas? Esto implica que la Ley fue dada a todo el mundo.
La misma Torá ordena: “Acuérdate del sábado para consagrarlo” (Éxodo 20:8–11). Por extraño que parezca, esta mitzvá, aunque olvidada por muchos judíos, comienza con “acuérdate”. Esto significa que estuvo vigente mucho antes de que se entregara la Torá en el Sinaí. El mandamiento dice que las bestias de carga también deben descansar, e incluso el extranjero que vive entre nosotros debe observar el Shabat. No se menciona si este extranjero es judío o no. Si la Torá prohíbe el trabajo de los animales en Shabat, ¿cuánto más debería descansar toda la humanidad en este día?
Por lo tanto, el Shabat es para todas las personas. Las Escrituras nos dicen que es una señal eterna de que nuestro Creador es quien nos santifica para él (Éxodo 31:13).
Un día de deleite
Quizás una de las razones por las que el Shabat no es más ampliamente aceptado sea que muchos lo malinterpretan como una carga. Pero, su propósito no es inhibir nuestra vida y nuestra libertad; es potenciarlas y preservarlas para que podamos disfrutarlas. El Shabat es un día de delicia (Isaías 58:13).
Cuando luchamos por llegar al final de la semana, ¡qué delicia es recordar que nos espera un día de descanso! De hecho, el ensayista hebreo Ahad Ha’am señaló: “Más que el pueblo judío haya guardado el Shabat, el Shabat ha guardado al pueblo judío”. A lo largo de toda la historia, ha preservado a la nación. ¡Imagínate qué tremenda bendición sería si el Shabat “guardara” así a toda la Creación!
El Shabat es un día no solo para hacer un alto en el trabajo sino también para estar en comunión con Dios. En el Shabat, pasamos tiempo con el Creador, tal como lo hizo la humanidad en el Edén cuando Dios mismo caminó con Adán y Eva. Ya no podemos estar con Dios en el Edén, pero aun así podemos disfrutar de esta dicha un día a la semana porque el Shabat es un anticipo del cielo que nos espera.
Una prueba de lealtad
Desafortunadamente, el Tanaj habla de poderes terrenales que intentarían cambiar la Ley de Dios (Daniel 7:25), especialmente el Shabat. Estos deshonrarán a Dios al instituir un día de descanso diferente, que no cuenta con la bendición especial depositada sobre el Shabat. Como resultado, el mundo perderá este privilegio de descansar, conectarse con Dios y experimentar las bendiciones de la obediencia.
Pero nosotros no necesitamos perdernos esas bendiciones. Ese sabor del cielo en la Tierra continúa para quienes guardan el Shabat. ¿Quisieras unirte en la siguiente oración al Creador del Shabat?
Nuestro maravilloso Creador, te estamos muy agradecidos por el Shabat, un día de descanso físico y de conexión contigo. Decidimos guardarlo por amor a ti. Capacítanos para ser fieles a tu santo día. Amén.
Si deseas obtener más información sobre cómo el Shabat está bajo amenaza política, cultural y espiritual, y qué puedes hacer al respecto, al dorso de este folleto encontrarás cómo comunicarte con nosotros.
1. Shemot Rabá 5:9.Copyright © 2023 by Sharing Hope Publications. Esta obra se podrá imprimir y compartir sin permiso previo del editor para fines no comerciales.Los pasajes bíblicos fueron tomados de la Santa Biblia, Nueva Versión Internacional®. Copyright © 1999 por Biblica, Inc.® Usado con permiso de Biblica, Inc.®
Suscríbete a nuestro boletín
Sé el primero en enterarte de las nuevas publicaciones.

Encuentra tu audiencia
Publicaciones destacadas
© 2023 Sharing Hope Publications